Hola chic@s:
Después de un breve tiempo sin publicar vuelvo de nuevo con otra recetita. Ésta la tenía en "borrador" desde hace un tiempo, pero mis obligaciones últimamente me han hecho no poder publicarla hasta hoy.
Los cupcakes están de moda, eso está clarísimo, por tanto yo no quería dejar pasar la oportunidad de apuntarme al carro, eso si, como siempre adaptando las recetas con harinas sin refinar y sin azúcar.
Como siempre, con los ingredientes que compré al principio de meterme en esta aventura, empecé a "bichear" por la red a ver como podría aprovechar las harinas que tenía y la remolacha que me sobraron del paleobrownie. A través del grupo de Facebook 50.000 recetas para celiacos, llegué a la receta de Salomé de su blog "salado y dulce sin gluten" y me pareció una idea buenísima.
Ingredientes:
Para el cupcake:
- 100 g de quinua cocida (viene siendo unos 50 g de quinua cruda)
- 15 ml de aceite de oliva
- 80 g de harina de arroz + 35 g de maicena
- 35 g de tagatosa (o 70 g de azúcar)
- 125 ml de leche (sustitúyelo por leche de avena o arroz)
- 2 huevos
- 1/2 cucharadita de vainilla o la raspadura de una vaina.
- 2 sobres de gasificante (el blanco y morado del Mercadona)
- 1/2 cucharadita de sal
Para la cobertura:
300 ml de nata para montar300 g de remolacha
3 hojas de gelatina neutra
60 g de tagatosa (o 120 g de azúcar)
Primeros hacemos los cupcakes. Para ello, en un bol, mezclamos las harinas, la tagatosa o azúcar, los gasificantes, y la quinua cocida. En otro recipiente mezclamos los líquidos: aceite, huevo, leche y la vainilla. Incorporamos los líquidos en el bol de los sólidos y mezclamos todo bien con la ayuda de una paleta espátula o una cuchara. No utilizar la batidora, ya que perderíamos los granos de quínua que después darán un efecto muy interesante al cupcake.
Ponemos las capsulas de papel típicas para magdalenas en unos moldes especializados para ello. Yo tengo unos muy monos de silicona que me compré en Ikea a muy buen precio. Hay gente que no utiliza moldes, solo las cápsulas. Es otra opción, pero se pueden abrir y perder la forma de magdalena.
Rellenamos las capsulas a 3/4 de su capacidad y las metemos en el horno con calor arriba y abajo durante 20 o 25 minutos a 170º. Recordad que si usáis tagatosa no debéis poner el horno a más de 170º, ya que se notará un sabor amargo del edulcorante y nos estropearía cualquier dulce que hagamos.
Enfriando los cupcakes. Aproveché también para hacer unas magdalenas |
Mientras se hornean nuestros cupcakes hacemos la mousse de remolacha. Hidratamos la gelatina metiéndola en un recipiente con agua fría y la dejamos un rato. Trituramos, con la ayuda de la batidora, la remolacha y le incorporamos la gelatina, mezclándolo todo con la batidora.
En un bol, montamos la nata, ponemos la tagatosa y después, mezclamos con la mezcla de remolacha y gelatina. Queda un color rosa chicle precioso. Dejamos enfriar en el frigorífico hasta que vayamos a utilizarlo.
Una vez que nuestros cupcakes estén hechos (un poco doraditos por encima) se dejan enfriar totalmente a temperatura ambiente. Cuando vayan a ser consumidos, se cubren con una buena capa de mousse. Yo le espolvoreé cacao para decorar y a disfrutar!!!!
Espero vuestros comentarios a esta nueva receta.
Hasta la próxima.